Así lo confirmaron, mediante un breve comunicado, el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta tras reunirse con el equipo de abogados para analizar el fallo de Furnari.
“Con relación al fallo recientemente dictado por un Juez de Primera Instancia de la Justicia Federal, y ante la opinión jurídica de la Procuración General de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires que corresponde seguir acatando el fallo dictado por la Cámara de Apelaciones de la Ciudad hasta tanto el conflicto sea resuelto de forma definitiva por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, el Gobierno de la Ciudad ratifica que las clases continuarán siendo dictadas de forma presencial como hasta el día de hoy”, señaló el breve comunicado del Ejecutivo porteño.
Horas antes, el juez Furnari había dejado sin efecto el fallo de la Justicia porteña que habilitó la presencialidad en las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires. El magistrado pidió al Gobierno porteño que “se abstenga de aplicar o ejecutar la medida dispuesta el pasado fin de semana”, en referencia al fallo de la Cámara en lo Contencioso Administrativo de la Ciudad de Buenos Aires que había ordenado mantener las clases presenciales en el distrito.
La resolución del juez Furnari fue emitida ante un pedido del procurador del Tesoro, Carlos Zannini, de admitir la competencia federal, declarar la inhibitoria para entender o resolver sobre el tema de la Justicia de la Ciudad y enviar el expediente a la Corte Suprema de Justicia de la Nación, por ser de competencia originaria.
De esta manera, el juez federal le solicitaba al Gobierno porteño que no aplique el fallo que habilitó el regreso a las aulas, y a la Justicia de la Ciudad que envíe el caso a la Corte Suprema, que tiene competencia originaria.
Ante el planteo de Zannini, el juez Furnari consideró que la Sala IV de la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal de la Ciudad actuó mal al no darle intervención al Estado Nacional en el expediente sobre el cual terminó resolviendo el pasado domingo. Por ello, hizo lugar a la inhibitoria planteada por el Gobierno y decidió que la Justicia de la Ciudad no es competente para resolver el tema, al tiempo que recordó que la Corte ya aceptó la competencia para tratar el asunto.
En el máximo tribunal está pendiente de definición un amparo presentado por el Gobierno de la Ciudad contra el Estado Nacional por la suspensión de las clases presenciales en virtud del aumento de casos de coronavirus.
“La pretensión llevada a conocimiento de esos jueces fue resuelta con total prescindencia de la norma específicamente aplicable al caso, lo que descalifica su decisión en los términos de la conocida doctrina de la Corte Suprema sobre arbitrariedad de sentencias”, sostuvo el juez Furnari en su fallo.
La Corte admitió su competencia en el tema y ahora lo tiene pendiente de resolución, pero el pasado domingo la Justicia porteña había ordenado garantizar las clases presenciales, lo que fue calificado como una “aberración jurídica” por parte del Gobierno. El fallo del juez federal Furnari ordena suspender esa modalidad hasta que falle el máximo tribunal.
El gremio docente UTE, en tanto, dispuso continuar con el paro de actividades en la Ciudad de Buenos Aires, informó esa organización.
“Los y las trabajadorxs de la Educación volvemos a convocar a un Paro Docente contra la presencialidad que propone (el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez) Larreta. La salud y la vida son prioridad”, dijo en un comunicado UTE, el más grande de los gremios docentes porteños.
OTRA VEZ HUBO CACEROLAZOS
Vecinos de distintos barrios de la Ciudad de Buenos Aires realizaron nuevos cacerolazos en rechazo al fallo de la Justicia Federal. Vecinos de barrios como Nuñez, Belgrano, Villa Crespo, Caballito, Recoleta, Retiro y Palermo salieron a las calles o a los balcones de los edificios a manifestar su malestar por la decisión judicial.