Lo dispuesto por la administración porteña en materia sanitaria frente al aumento de casos de coronavirus, contrastó con las expresiones vertidas días atrás por la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, quien calificó la implementación de esa medida en territorio bonaerense como un atentado a la “libertad” de los ciudadanos.
La decisión del Gobierno porteño de ordenar a las clínicas y sanatorios de la Ciudad “reprogramar y suspender” por 30 días las cirugías e intervenciones médicas en patologías que no sean de carácter urgente volvió a exponer las contradicciones en la alianza opositora Juntos por el Cambio, tras las críticas del ala dura del espacio a esa misma medida dispuesta en la provincia de Buenos Aires para dar prioridad al tratamiento del Covid-19.
Lo dispuesto por la administración de Horacio Rodríguez Larreta en materia sanitaria frente al aumento de casos de coronavirus, contrastó con las expresiones vertidas días atrás por la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, quien calificó la implementación de esa medida en territorio bonaerense como un atentado a la “libertad” de los ciudadanos.
“Tuvieron un año para adecuar el sistema de salud. No lo hicieron. Ahora, el Gobierno de la provincia de Buenos Aires interviene el sistema de salud privado y pide suspender cirugías para dar prioridad al Covid. Se meten con la libertad y disponen de nuestra vida”, había publicado Bullrich, en su Twitter, el martes último.
La medida en la Ciudad fue dispuesta a través de un decreto que lleva la firma del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, para procurar “la mayor cantidad de recursos asistenciales disponibles que permitan la atención de pacientes con Covid-19, tanto ambulatoria como de internación”.
Días atrás, además, el Gobierno de la Ciudad había reconocido que le pidió respiradores a la Nación para reponer aquellos que la administración porteña le transfirió al sistema privado de salud del distrito.
El martes último, el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, admitió que la Ciudad le había prestado a clínicas y sanatorios privados 50 respiradores que la administración pública local tenía de reserva, y que luego pidió a la Nación que se los repusiera para hacer frente al incremento de internaciones en unidades de terapia intensiva.
“Le hemos prestado nuestra reserva de respiradores a diferentes efectores privados de la seguridad social, nacionales y universitarios para que ellos aumenten su capacidad de respuesta”, había señalado Quirós en conferencia de prensa.
El pedido del Gobierno porteño a la Nación se produjo el domingo último, tres horas antes de la conferencia de prensa que brindó Rodríguez Larreta para comunicar el acatamiento de su administración al fallo de la Justicia porteña a favor de la presencialidad en las escuelas del distrito.