El responsable de la Seguridad en la provincia de Buenos Aires llegó con su mascota a una protesta de transportistas por la escasez de gasoil
El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, volvió a ser protagonista de la discusión pública luego de algunas semanas en las que se mantuvo “guardado”.
Su reaparición fue “a lo Berni”: se subió a un helicóptero, aterrizó en plena Autopista Buenos Aires-La Plata e intimó a transportistas que realizaban un bloqueo por la escasez de gasoil a que cesen con las protestas. “Les doy cinco minutos, si no me llevo todos los camiones y los meto presos; este país necesita orden”, vociferó frente a las cámaras.
La estrategia fue efectiva. Los transportistas movieron sus imponentes vehículos y le pidieron al funcionario que interceda para que en el Ministerio de Transporte escucharan sus reclamos. La situación en algunas provincias es angustiante por la falta de gasoil y las últimas medidas dictadas por el gobierno nacional para resolver la cuestión aún no dieron resultados positivos.
Berni no llegó solo. Estuvo acompañado por “García”, un oficial al que le ordenó en vivo que despliegue a la Policía para avanzar con un operativo que finalmente no hizo falta porque los camioneros se retiraron por su propia voluntad. Y por “Bona”. ¿Quién es Bona? La perra del ministro. “Es mi perra, todo el día está conmigo y la llevo a todos lados”, contó.
Bona es una perra Ovejero Alemán y su nombre responde a “bonaerense”, en alusión al distrito en vive, trabaja y hace política el ministro de Seguridad de Axel Kicillof.
En su reaparición, Berni fijó además opinión sobre temas que están en la agenda pública. Coincidió por ejemplo con Cristina Kirchner -de quien se distanció el año pasado- al asegurar que el peronismo se creó “con la fuerza del trabajo” y no con los planes sociales. La vicepresidenta apuntó el lunes contra el Movimiento Evita por la cantidad de subsidios que maneja, lo que provocó la respuesta del Gobierno.
También redobló sus críticas contra el presidente Alberto Fernández y se jactó de ser el primer dirigente en cuestionarlo hace dos años y medio, “cuando tenía un 90% de imagen positiva”.
“Lamentablemente no me equivoqué y ahora tenemos que poner la energía para solucionar el grave problema que estamos atravesando los argentinos”, dijo. Y avanzó: “Hoy el gabinete está loteado y cada ministerio es un lugar de ejercicio de poder individual que no ejecuta políticas públicas para el conjunto”.
El silencio de las últimas semanas estuvo precedido de una frase que había generado una fuerte polémica en medio de las internas en el Frente de Todos: “El que trajo al borracho que se lo lleve”.
– ¿Usted le dijo borracho al Presidente?, le preguntó Marcelo Longobardi en uno de los reportajes que concedió durante la mañana.
– No, yo nunca personalizo estas cuestiones, me parece que fue un dicho que hay que ponerlo en circunstancias. No pretendo hacer evaluaciones personales y faltarle el respeto.
Cada vez que Berni dice o hace se especula con una futura candidatura, ya sea en territorio bonaerense o incluso en las PASO presidenciales del 2023. ¿Será? Perro que ladra no muerte, dice el refrán. “¿Muerde?”, le preguntaron a Berni sobre Bona en radio La Red. “No hay perro que no se parezca a su dueño”, contestó.
“Por lo tierno, digo”, se atajó.