Alberto Fernández llegó al último día hábil del año con nuevas salidas de funcionarios en distintos organismos públicos: Victoria Donda (Inadi), Félix Crous (Oficina Anticorrupción) y Rodolfo Gabrielli (Casa de la Moneda). Los tres casos son aislados y obedecieron a motivaciones muy distintas, aunque todos obligan al Presidente -que pretendía terminar con la ola de recambios- y a sus ministros a pensar en nombres para los sucesores que lo acompañarán en el último año de su gestión.
El caso más resonante fue la salida de Donda de la intervención del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi). La funcionaria, que volvió al seno del kirchnerismo y hoy se referencia fuertemente en la vicepresidenta -estuvo en primera fila en el acto del martes en Avellaneda-, publicó una carta en la que aseguró que ella decidió renunciar y esgrimió distintos motivos. Con duras críticas a Fernández, dijo que tenía “desilusión” con el Gobierno “de hace tiempo” y planteó disidencias con “muchas de las decisiones que se toman de una parte del Ejecutivo”.