Así lo anunció una cámara que nuclea a pequeños empresarios del sector. Dicen que la suba otorgada no cubre la devaluación y que enfrentan una crisis de rentabilidad
Las estaciones de servicio independientes, representadas por la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (CECHA), expresaron su rechazo a la reciente decisión del Gobierno de congelar los precios de los combustibles, advirtiendo que tales medidas ponen en riesgo la viabilidad de sus negocios. Y amenazaron con cerrar de noche a modo de protesta.
CECHA, que agrupa a cámaras y federaciones de todo el país, anunció hoy a través de un comunicado que adoptará medidas de fuerza en respuesta a la decisión gubernamental. Estas acciones incluirán el cierre nocturno de todas las estaciones de servicio a nivel nacional, la solicitud de procedimientos preventivos para establecimientos en crisis y la suspensión de las revisiones paritarias en curso.
“Tras la decisión del Gobierno de congelar nuevamente el precio de los combustibles, CECHA anuncia medidas de fuerza que se aplicarán a la brevedad y en forma escalonada”, dijo el comunicado.
La organización señaló que el incremento del 12,5% aplicado a los combustibles la semana pasada fue inferior al porcentaje de devaluación del lunes 14 de agosto -ese día el dólar subió 22% en el mercado formal-, lo que tuvo un impacto negativo en el sector. Las pequeñas y medianas empresas, que comprenden más de 5.000 estaciones de servicio y garantizan 65.000 empleos, han enfrentado pérdidas de rentabilidad desde antes de la pandemia.
La semana pasada el Gobierno acordó con las principales empresas del mercado una suba de los precios seguida de un congelamiento hasta fines de octubre, después de las elecciones presidenciales. El acuerdo fue aplicado por YPF, la empresa que cuenta con más del 50% del mercado de despacho de combustibles en el país, Axion, Shell, Puma y otras. Sin embargo, ese aumento que fue acatado por las redes de las grandes empresas encuentra resistencia entre los empresarios independientes que cuentan con sus propias estaciones de servicio asociadas o no a redes.
Si bien en el comunicado CECHA reconoció el derecho del Gobierno a implementar medidas de emergencia en beneficio de la economía y los consumidores, instó a las autoridades a considerar acciones complementarias que atenúen el impacto en las estaciones de servicio.
“El aumento aplicado a los combustibles fue menor que el porcentaje aplicado a la devaluación, por lo que el efecto resulta negativo para quienes apostamos por el sector”, detallaron los estacioneros.
La confederación también ha destacado la falta de diálogo con las autoridades nacionales y la ausencia de respuestas favorables a sus preocupaciones. Esta situación podría llevar al cierre de estaciones con ventas insuficientes para cubrir sus costos operativos.
Además, CECHA ha hecho un llamado a las empresas petroleras para que revisen las comisiones por venta, que actualmente promedian el 10% a nivel nacional. En particular, señalaron que la asistencia proporcionada por YPF a sus estaciones afiliadas es insuficiente para enfrentar la crisis actual.
“El negocio de los combustibles no para de complicarse. Los empresarios, que elegimos y amamos este trabajo, ahora lo vemos desgastante y hasta desesperanzador”, dijo el comunicado.
Las estaciones de servicio en el país enfrentan desafíos crecientes y piden ser escuchadas por el Gobierno. Los propietarios y operadores del sector subrayan que su compromiso va más allá de la inversión financiera, ya que también han dedicado esperanzas, esfuerzos y tiempo a sus negocios.
CECHA concluyó su comunicado con un llamado urgente: “Nuestra crisis de rentabilidad es insostenible. Ya no podemos esperar”.