Mauricio Macri y Patricia Bullrich le acercaron a Javier Milei un apoyo fundamental: los libertarios se entusiasman con algunas mediciones que indican la amplia mayoría de los votos de la exministra -cerca del 90%- se trasladarán a su candidato en el balotaje.
Las apariciones mediáticas que Macri protagonizó el domingo fueron el final de un raid durante el cual intervino para correr la imagen de Milei desde la extrema derecha hacia el centro. Cerrada la alianza, ahora en La Libertad Avanza esperan que el expresidente baje su exposición. Un paso necesario, explican, para que Milei recobre cierta centralidad.
“Va a ser un Milei un poco más moderado, pero no va a renunciar a su personalidad, que es muy fuerte”, dicen cerca del libertario.
Del otro lado, la intención del equipo de Sergio Massa es poner al libertario en una encerrona. Los colaboradores del tigrense a cargo de la estrategia electoral creen, de acuerdo a trabajos de opinión pública encargados por el oficialismo, que el pacto de Milei con Macri y Bullrich genera dudas en la tropa libertaria y que el líder opositor pierde votos entre su propio electorado.
Las razones son diversas: según UxP, desde que Milei ahora introdujo en su propio espacio a dirigentes que forman parte de la casta que tanto cuestionó hasta que la propia Bullrich haya puesto en duda su plan de dolarización, tal vez, la principal propuesta de su plataforma electoral y con la que sedujo a buena parte de sus votantes jóvenes.
Destacan, además, que el arribo del PRO a La Libertad Avanza podría generar que frenen proyectos claves, como los cambios respecto a la tenencia libre de armas o la ruptura de las relaciones diplomáticas con China y Brasil. “Se apuraron en mostrar el acuerdo”, plantean en el entorno de Sergio Massa.
Por eso, por más de que Macri lo tenga en el centro de sus ataques, el ministro-candidato no lo critica. Dice que lo respeta como exjefe de Estado. Massa, que se coloca en el lugar imaginario de Presidente -este martes está en la UIA y también medidas de anuncia protección laboral para repartidores y trabajadores de las apps-, enfoca su campaña en criticar la personalidad de Milei.
Mientras se muestra como una opción previsible y ordenada, el candidato de Unión por la Patria señala que Milei es la personificación de la incertidumbre y la inestabilidad emocional. En su entorno celebraron cuando escucharon a Elisa Carrió decir que, por conciencia, no va a votar por Milei. “Ella no apoya la locura porque estudió mucho sobre los orígenes del totalitarismo”, dicen, en alusión al libertario.
La estrategia del oficialismo, entonces, es dejar a Milei encerrado discursivamente: si se modera demasiado, traiciona a su electorado; y si levanta el perfil, se expone a la crítica de Massa.