El Gobierno Nacional ha formalizado una profunda reestructuración en la Ley de Ministerios mediante la promulgación del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 825/2025. Dicha normativa establece una redistribución de competencias sustantivas entre el Ministerio del Interior, bajo la dirección de Diego Santilli, y el Ministerio de Seguridad, a cargo de Patricia Bullrich. La disposición, refrendada por el Presidente Javier Milei y la totalidad de su Gabinete, entró en vigor de manera inmediata.
De acuerdo con lo estipulado en el Boletín Oficial, la cartera de Interior incorpora atribuciones estratégicas que previamente no se encontraban bajo su órbita de control, mientras que el Ministerio de Seguridad consolida su rol en materia de política migratoria, fuerzas federales y gestión de emergencias nacionales.
Interior asume el control del RENAPER y amplía su influencia política
El decreto impulsa una modificación estructural en el Ministerio del Interior, que a partir de ahora ejerce la conducción del Registro Nacional de las Personas (RENAPER). Esto lo constituye en la dependencia responsable de la identificación ciudadana, el registro civil y la certificación institucional de la ciudadanía.
Adicionalmente, el ministro Santilli asume la representación del Poder Ejecutivo Nacional en la relación con el Congreso, una función que lo posiciona como articulador directo ante el Poder Legislativo. A esto se añade una competencia no prevista: la dirección de la política deportiva, que abarca la administración de recursos, becas y subsidios destinados al deporte federado y amateur.
La reforma también le confiere la coordinación de actos patrióticos, la gestión de efemérides, la preservación de monumentos históricos y la intervención en asuntos relativos a aguas interprovinciales y zonas de frontera.
Otro aspecto relevante del DNU es la participación del Ministerio en la protección e inclusión de comunidades indígenas, un área cuya gestión previa se encontraba distribuida entre diversas dependencias estatales.
Por su parte, el Ministerio de Seguridad recibe un conjunto de competencias que refuerzan su presencia en asuntos de seguridad interior. Entre sus nuevas responsabilidades se destaca la coordinación integral de las fuerzas policiales y de seguridad en el ámbito nacional, incluyendo las jurisdicciones provinciales y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
La ministra Bullrich también tendrá bajo su jurisdicción la aplicación de la Ley de Manejo del Fuego, el diseño y la supervisión de la política migratoria, el control fronterizo y la definición de los criterios de asilo para ciudadanos extranjeros.
El decreto subraya, asimismo, que el Ministerio de Seguridad será la entidad encargada de liderar las acciones ante emergencias y catástrofes, asumiendo un papel preponderante en situaciones de crisis y eventos climáticos de naturaleza extrema.









